El cerebro de tu hijo es como una esponja, en los primeros años de su vida. Seguro que muchas veces hemos envidiado la facilidad que tienen los niños para aprender inglés, ese desparpajo al hablarlo, y como se divierten viendo películas o dibujos animados en inglés.
Por esta razón es que los expertos en el aprendizaje del lenguaje animan a que los niños y niñas aprendan cuanto antes otros idiomas.
Las conexiones neuronales del cerebro de tu hijo se generan durante los primeros cuatro años de su vida, es la etapa perfecta para alimentarlo con información y estímulos lingüísticos.
Ellos tienen mayor predisposición a conocer cosas nuevas y aprender. Los pequeñitos tienen menos resistencia a entender mensajes básicos en otro idioma, y se muestran más predispuestos a reproducir las frases aprendidas, y a imitar los sonidos sin ningún tipo de vergüenza, como algo natural, donde equivocarse y rectificar es un paso más hacia el éxito.
Cuando el niño adquiere el nuevo lenguaje, la información que el recibe se integra en la misma zona del cerebro, esto no ocurre así en los adultos, nosotros necesitamos dos áreas neuronales distintas para aprender un el nuevo idioma.
Igualmente, los niños pasa por varias etapas antes de conseguir ser bilingües.
Mentalmente se construye una lista de palabras de las dos lenguas que se está aprendiendo, aquí se observa una confusión de idiomas. Paulatinamente, las frases que articula el niño son algo más complicadas, llegando a oraciones complejas, donde se mezclan los dos idiomas hasta los 3 años.
Poco a poco el niño comienza a mezclar menos. A partir de los 4 años el niño va comprendiendo que se trata de dos idiomas distintos.
Beneficios de una segunda lengua
- Plasticidad Mental: La conmutación entre dos idiomas desarrolla las partes del cerebro del niño que controlan el cambio entre diferentes corrientes o actividades del pensamiento. Mejorar esta capacidad de control mental puede hacer que las mentes bilingües sean más flexibles, multitarea y les permite poder pensar más allá de lo evidente.
- Mejor Atención: Actualmente los investigadores plantean la hipótesis de que la atención y el control en las personas bilingües se deriva de la capacidad de mantener dos idiomas separados en la mente sin mezclar las palabras y la gramática.
- Sagacidad de la Memoria: La ciencia ha demostrado que el ser bilingüe ayuda a las personas evitar la pérdida de memoria a medida en que van avanzando los años con el envejecimiento. Esto es debido a que al tener la capacidad de separar mentalmente los idiomas, ayuda a agudizar el ingenio y la memoria.
- Inversión a Futuro: Es un valor enorme en este mundo cada vez más globalizado, donde hablar inglés u otro idioma es fundamental en la carrera profesional y personal de estos niños. Un segundo idioma puede abrir muchas puertas profesionales.
- Determinación de Problemas: Las personas bilingües tienen una mayor capacidad al momento de solucionar problemas. Tienen una mayor habilidad para pensar de manera creativa y flexible al momento de saber como superar obstáculos.
Actualmente la formación de los niños en inglés y de otros idiomas en escuelas y colegios es bastante limitada, por esto, si queremos que nuestros niños aprendan inglés, la mejor opción es lograr la mejor inmersión posible, tratando de hablarles en inglés, leyendo o simplemente viendo dibujos en este idioma.
Lo más recomendable es apuntarlos en clases de inglés para niños, con profesores especializados en niños.